Pero no ha sido algo épico, creo, ha sido saber jugar bien nuestras bazas.
- Saber cuando rifar el balón para alejarlo de nuestra portería aunque haya que estrellarlo en el techo de la magdalena 2, saber cuando toca colgarse del larguero incluso;
- Saber aprovechar que tenemos una tripleta atacante que te garantiza oportunidades y resultados, goles y peligro, pasión aderezada con calidad.
- Saber que el de al lado va a jugarse el tipo por despejar un balón, recordar que cada sprint merece la pena porque no es en balde. Nunca lo es, aunque a veces se nos olvida.
- Saber que hay una gente fuera de la pista que está sintiendo algo muy cercano a lo que tu sientes en ese mismo instante, que si te raspas no solo te duele a ti, que si alguien recibe falta, a ti el tobillo también te duele un poco.
- Saber sufrir cuando el rival achucha, y los de hoy lo han hecho a base de bien, los guantes de Piris y Miguel y los palos pueden dar fe. Me parecen un equipazo, la verdad.
Creo que haríamos mal si pensamos que ya tenemos todo hecho por haber vencido hoy.
Hoy empieza todo.
Feliz Navidad a todos los que leais esto.
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