1.6.09

El MVK de Mourinho


Lo sé, hay veces que se me va la cabeza con los títulos de las crónicas, pero esa fue la sensación que me quedó tras la victoria de ayer por 5-3 frente al Racing Spirit. Es posible que mi cerebro me intente engañar viendo como mi idea de Mourinho como futuro entrenador del Madrid no solo no va tomando forma sino que parece que nunca se tuvo en cuenta (ay Floren). Llamémosle X.

Pero insisto, la idea que yo tengo de los equipos de Mourinho (sobre todo de su etapa en el Oporto y en el Chelsea, de su Inter solo habré visto dos o tres partidos, que yo recuerde) es básicamente la que desarrollamos ayer nosotros, jugar de manera inteligente, aprovechando las virtudes propias según los recursos propios, los del rival y las circunstancias del momento. Y eso,sobre todo en la segunda parte, creo que ocurrió ayer.

Llegábamos al partido con varias bajas, como Marcos, Goro y Piris, hasta Jaime estaba out of town. Y el partido no comenzó ni bien ni mal para nosotros, ni bien porque empezamos perdiendo por una cierta tostada mañanera, ni mal porque a los pocos instantes una gran jugada del MVK entre Victor y Chusquito terminaba con pase de la muerte de nuestro Iniesta (insisto en esa idea) rematado por un rival en propia puerta, injusticia para el defensor pero justicia para los nuestros, quienes supimos despertar a tiempo. La cosa es que el rival aprovechó un rechace en una contra para anotar el 2-1, guarismo con el que se llegaría al descanso.

Ay, los descansos. Cuantas veces decimos cosas que luego no hacemos, como demostrando que un magnífico diagnóstico no significa un buen tratamiento. En el de ayer comentamos varias cosas, como que había que tirar a puerta, como que había que combinar más y no rifar balones, como que había que estar más juntos. Y pese a que el rival volvió a marcar en una contra, poniéndose con dos goles de ventaja, esto no solo no nos haría bajar los brazos, sino que nos hizo venirnos arriba, cuales banderillas picantes o cual café mañanero bien cargado. A los pocos minutos el equipo comenzó a ir poniendo en práctica lo que se había comentado, por ejemplo que había que tirar más, y un servidor marcaba de disparo desde fuera del área poniendo el 3-2 en el marcador. El siguiente argumento del descanso era no rifar balones y gracias a eso llegaron tres nuevos goles, los tres de Víctor, a quien le da igual la pierna, el balón o la circunstancia, logrando uno de ellos a la salida de un córner, otro tras regatear al portero y en posición escorada y otro culminando una contra.

Y nos quedaba la tercera premisa, estar más juntos, ser un bloque de cuatro con un portero que no se quedara solo, y pese a más de un susto como algún tiro al palo, logramos defender ese resultado de 5-3 que nos daba los tres puntos. Y no sin sufrimiento (hoygan).

Tres argumentos de tres cumplidos: saber aprovechar virtudes propias, limitar en la medida de lo posible las virtudes del rival (que tienen algunos chutadores de media distancia tremendos) y tener en cuenta las circunstancias del partido. No se que hubiera dicho Mourinho, pero creo que ayer nos fuimos bien contentos de nuestro partido, hay victorias ajustadas que saben mejor que algunas goleadas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es tan cierto que se te va la cabeza como que me ha encantado el post, ya que me perdí el partido, como que la memoria ya la has perdido por completo, porque el equipo fue Racing Spirit y no Delirio.

Que tiempos aquellos que recordabas cosas, galán...

Anónimo dijo...

Mi mdare, que no habia cargado la cabecera cuando entré y al volver hallo esta maravilla!!

Viva Junior, viva Anthony!!!

mvkmiansero dijo...

AL LORO!

joder, ya hasta confundo los equipos....

voy a cambiarlo en cuanto pueda.